Ramsés

Se llama Ramses y su única pertenencia de valor es un Ipod lleno de rock ochentero. No es alto, ni bajo, ni blanco, ni dominicano, es solo Ramses; ahora, si hay que encasillarlo: el es actor y locutor. Y combina estas dos profesiones a la perfeccion en un programa de radio dedicado a cine en la emisora donde yo trabajaba. Ramses, el que sabe excelentes chistes sobre jesucristo ¡como me encantó compartir contigo!

No era necesario que me dijera que yo le agradaba, como lo hizo, el sentimiento es mutuo. Siempre le gustó la musica que ponía y a mi su programa. Con él comparto parte importante de mi gusto musical y de mi sentido de la no-pertenencia a este mundo.

Ramses está solo, porque su unico amor, su madre, murió el año pasado. Con dolor piensa en ella cada vez que se queja de tener que lavar su propia ropa y curar su propio corazon. Su alma sencible la extraña.

Es afeminado, pero no puede evitar opinar acerca de "lo buena que está" Lindsay Lohan y decir que él quiere que ella se pare delante de él y le diga "I want to come first"

En la gabeta de mis amigos olvidados está Ramses, y yo me muero por que sigan mis lecciones de guitarra con él y comer donde Don Nacho haciendo cuentos que me hagan reir, solo por saber que estás bien.